Invitaciones remotas - Conferencia performática

- Elegir un criterio de agrupación de los materiales (uno cualquiera, uno posible, azaroso).
- Respetarlo como si fuese obligatorio (mientras funcione, sirva o sea entretenido).
- Cambiarlo si ya no va, si se agotó o si no dio nada.
- Dejarlo a un lado (podría servir más tarde).

Invitaciones remotas muestra la foto de un proceso. No de uno con largada y meta, sino de uno que fluye en una continuidad de la que no vemos los límites. Los extremos que podemos vislumbrar son elegidos, igual que los momentos de los videos que se muestran, igual que las consignas propuestas, igual que los fotogramas citados textualmente, igual que los creadores del cadáver exquisito danzado que devino en esta invito.

La experiencia es amena, una especie de tertulia con té, pochoclos y almohadones en el suelo que llaman a prestar un cuerpo diferente del que habitualmente se presenta en las butacas de un teatro o en las gradas de una sala. Un cuerpo con voz, capaz de intervenir, dispuesto (aunque no obligado) a devolver los resultados de aquello que entra en sí y se transforma.

Cómo se viven esos 60 minutos puede variar inmensamente, pero es casi seguro que nadie sale de esta experiencia sin alguna idea nueva, sospecha o, cuando menos, duda acerca de la creación coreográfica y de los infundir caminos que se encuentran en la concreción de cada obra.

Nota de María José Lavandera para Revista Revol >> “Invitaciones remotas”: reorganizar el dispositivo dancístico

INVITACIONES REMOTAS - Conferencia performática

Conferencia de Colectivo Micro: Virginia Barcelona, Carolina Tironi, Elina Rodríguez